Competencias. Necesidad de una definición operativa
En diferentes instituciones educativas a los que asisto, tanto del sector público como del sector privado, es una constante el escuchar la dificultad para llevar a la práctica los nuevos modelos de educación por competencias.
Al preguntar qué es lo que más se les complica. Se quedan callados y después de un lapso resonden: "todo". No sabemos cómo empezar. Nuestra única solución ha sido capacitarnos y leer.
Es evidente que el problema está en la falta de claridad.
Las teorías educativas sobre competencias difunden cada una su definición conceptual de competenicas, así como la justificación de la misma y sus beneficios pero se olvidan de algo muy importante. Proveer a los docentes de definiciones operativas.
¿Cuál es la diferencia entre definiciones conceptuales y operativas? Es simple:
1. Las definiciones conceptuales pretenden comprender todos los elementos de las competencias educativas para poder explicarlos. Explicar su origen, su génesis y sus beneficios.
2. Las definiciones operativas proporcionan indicadores y procedimientos para tomar decisiones a partir de las definiciones conceptuales.
Una teoría de competencias que sólo proporciona definiciones conceptuales es dudosa y sospechosa de autoritarismo.
Una teoría de competencias con definiciones operativas nos facilita poner en práctica los procedimientos y evaluar los indicadores señalados y así, poder mejorarla o rechazarla. Muchos teóricos evitan las definiciones operativas por dos razones:
a. Olvidan que las teorías se deben poner a prueba, deben verificarse en la realidad, mejorarse o deshecharse.
b. Pretenden imponer sus conclusiones documentales y documentadas en gabinete pero no en los hechos.
0 comentarios